lunes, 30 de enero de 2012

Un día de viejas y otras ideas.



¿Pero qué le pasa a la gente? Hoy he llegado a la conclusión de que a más de la mitad de los que te rodean les falta un tornillo. La vida está llena de subnormales, incluso puede que para otros muchos yo sea una del grupo, no lo sé. Para mí hoy el grupo son casi todos.
Puede que sea la saturación mental por los deliciosos exámenes o por la concentración añadida de no comerme de una sentada una Caja Roja de bombones Nestlé . Qué va, es que de desagradecidos está el mundo lleno. Y de los que se empeñan en hacerlo todo feo y difícil también.

Con lo feliz que debería estar yo con mis notas en la facultad y la llegada del disco de Len. La llegada del disco de Len!!
Se filtró hace unos días el disco enterito en la web de un periódico y de ahí a mas sitios. Pero no he querido (con mucha fuerza de voluntad) escucharlo, porque nadie me va a quitar el gusto de ponerme el cedé, tirarme en la alfombra e irme al séptimo cielo. Me dijo que me llamaría, el dependiente de mi tiendecita. Pero prefiero ser pesada, no me fío mucho y ahora antes de cerrar me llegaré a preguntar cuándo llega. Puede incluso que lo tenga un día después del resto, siempre llega antes en el Corte Inglés que allí pero ¿y lo bonito que es entrar en una tiendecita de discos?

Aunque no todas como digo, algo en adelanto si que me he empapado. Han sido cuatro canciones, para darle forma a mi presentimiento. Acerté, este disco es EL DISCO, hacedle caso a Joserra con su La arruga es bella porque este señor, Leonard Cohen, nos ha dedicado una lista de POMs. Aseguro que hay cuatro y no creo que las haya dejado huérfanas. 

Pinchad, pase VIP al cielo.

No es un día para estar triste, ni enfadada, ni frustrada.Me empeñaré en que no sea así, si vuelvo a casa 
con el Old Ideas ni necesitaré ese empeño. O mejor dicho dará igual el empeño, canciones como éstas te entristecen, te enfadan, te frustran, te alegran. Te aceleran el pulso y te exfolian el corazón.







viernes, 27 de enero de 2012

Y una vez más ELLOS.

Vuelve a llover. Qué gustirrinín no tener que volver a salir de casa hoy. Entre apuntes y apuntes una de éstas.




miércoles, 25 de enero de 2012

El patio de mi casa es particular.



Vivo en un bloque de pisos inmenso, no por la altura si no porque en cada planta hay al menos dieciséis viviendas. Sí, creo que no exagero, son dieciséis justas. Casi no conozco a ningún vecino y encima creo que hay otra chica a la que me debo parecer porque hay señoras que me charlan como si continuásemos una antigua conversación. 
Pero es normal el que no nos conozcamos, estamos muchos estudiantes por aquí y creo que las familias casi prefieren no tomar contacto con el vaivén de chiquillos. Al menos casi todas, yo he tenido suerte en eso y siempre puedo contar con ese matrimonio joven que me acerca a por una bombona en caso de emergencia. 
El caso es que vivo en un bajo y mi cuarto da al patio interior. Y como hoy tocaba darle un repasito, abrí la ventana, puse algo de música y manos a la obra. 
La primera opción fue mi nueva adquisición, la caja Live Anthology de Tom Petty. Me puse el disco número cuatro, terminó y me dije de cambiar. Me apetecía poner La Creedence. Y nada más parar la música escucho a un hombre por el patio hablándome o mejor dicho, casi gritarme que no se me ocurriera quitar la música. Le contesté también casi a voz de grito que había acabado el CD y que iba a poner Pendulum, de Creedence Clearwater Revival. 
Y no quedó ahí la cosa, a partir del momento quedamos en que cada uno iría eligiendo de tres en tres canciones. No me desagrada hacer de diyei pero me daba curiosidad los gustos de mi vecino sin cara. Fue una guerra musical dura y al final gané yo. Tenía demasiados ases bajo la manga, no quise tirar de clásicos y lo rematé. 
Terminó pidiéndome una reposición de Pendulum, quería escucharlo entero. Así que me apiadé de él y me puse el equipo en la cocina mientras me apañaba el almuerzo. 
Mi padre se encontró la mañana de Reyes con un disco de La Creedence y desde entonces le estoy dando vueltas y hay un antes y un después. Sabía de la grandeza del Cosmo´s Factory, pero el  Willy and the Poor Boys es igual de bueno o el Green River que sólo es bueno por tener algo tan bien hecho como Bad Moon Rising.
Bayou Country es desde mi punto de vista el más fresco de todos, seguramente porque fue el segundo y encierra el sonido más creedence,.
A la hora de comer recogí el disco y con unos grados de audición menos me senté a la mesa. La misteriosa voz no me volvió a hablar y yo no quise gritar más tampoco. No tengo ni idea de quién puede ser, de si lo he visto junto al buzón o no. Pero compartir ese rato poniendo canciones ha sido de lejos el mejor rato que he pasado con un vecino. Es agradable no tener que escuchar a David Guetta para variar cuando abro la ventana.






La exquisitez de Born On The Bayou es infinita. Colofón. 



miércoles, 18 de enero de 2012

Even in the quietest moments.



Porque cada día sale el sol. Este disco es tremendo, casi había olvidado lo genial y obra maestra que es. Te hace olvidar los "malos rollos" y centrarte en lo que de verdad importa, que estamos aquí.

                                   (no es el vídeo que andaba buscando pero es que la canción...)


Escuchad el disco y disfrutad   http://open.spotify.com/album/18TiCDixtBNarD55Yw2aTU 

martes, 17 de enero de 2012

Sweet home Muscle Shoals, Alabama.



Estoy empezando a creer que la mente humana tiene un cupo determinado y que el mío ahora mismo está casi agotado. Con los exámenes por más que digan o que quiera una es imposible tener tiempo para sí, como mucho te escuchas un disco al día y te ves algún capitulo de esas series que están ahora tan de moda.

Y queda lo que no son los exámenes, hoy no es un buen día y por eso a pesar de mi falta de tiempo necesitaba esto como el comer. Analizo y no me pasa nada, hay días mas transcendentales que otros en lo que nos sentimos más insignificantes y no hay más. Para colmo el blog de Joserra con su La arruga es bella haciéndonos pensar en tantas cosas gracias a esa forma que tiene de escribir que te exprime hasta el más profundo sentimiento.

La arruga es bella nos dice, y cuánta razón tiene. Eso lo comprendemos no demasiados, igual que no demasiados comprendemos quién fue Amy, una joven con otro tipo de arrugas bellas que no por eso le quitaron sabiduría a sus canciones. Porque ahora se llevan las canciones. Con un día como el de hoy se me ha venido ella a la mente, pobrecita. Qué mierda.
Lo que tendría que haber sido charlar con ella, o quizás le costaba hablar de sí misma tanto como a mí y por eso prefería cantar. Quizás sus composiciones eran su único escape. Que se quede con Adele o Duffy (vaya paliza que les metemos a las pobres) quién quiera, yo me pido a la reencarnación blanca de quienes pisaron The Fame Studios. Perdonadme por favor pero si colásemos por decir un nombre una canción de Adele en  por decir otro nombre la caja EXTRAORDINARIA de estos estudios daría un tufo que no veas. Amy ya es otra cosa.Y lo de esta caja es muy gordo.

                                 
Su pareja de voces Arthur Alexander abre la función con la primera canción del primer cedé de los tres con You better move on, una oda a la elegancia. El cómo te atrapa. Parece imposible.


O una de Joe Simon, Let´s do It Over que es orgásmica os lo juro. Cada canción es la gota que colma es vaso, descolocaos con Lady In The Rain de Lowell Fulson y pedid un trato con el más allá cuando escuchéis a Clarence Carter con Snatching It Back. Cada canción, cada canción.






domingo, 1 de enero de 2012