miércoles, 8 de febrero de 2012

Os invito a navegar




En mi casa siempre nos han inculcado a mi hermana y a mí lo que creo que es lo más valioso que tengo. El amor por saber.
En el caso estudiantil no es que no me importen las notas, las necesito y a quién no le gusta un sobresaliente. Pero mis padres han luchado siempre para que aprecie mi esfuerzo y para que aprecie la importancia que tiene el no estudiar lo justo, el no dejarlo todo en lo que me piden. 
Tengo mucha suerte, porque algún día podré explotar esa curiosidad. Algún día la arquitectura me dejará crear y  me atrevo a decir que entonces será cuando de verdad me daré cuenta de la inmensa lección de mis padres. Porque arquitectos hay y de mi misma promoción salimos un puñado de golpe. Pero después te encuentras a uno que dice, pues yo además hice historia del arte. Y habrá quién se pregunte y para qué. Pues el mismo nombre habla por sí sólo, para entender el arte a lo largo de la historia. Pero si la historia está pintada, esculpida, construida. La arquitectura es mucho más que ecuaciones, es una forma de expresar sentimientos. Miras un edificio y ves a la persona que lo creó.  Marvin tiene su voz, sus canciones y yo tendré eso.
Y no es que no me hubiera gustado estar a la paz de Marvin. Jo que si me hubiera gustado. Expresarme con mi voz, con una guitarra. Amo la guitarra, no encuentro un sonido más hermoso que ese en un mundo repleto de sonidos preciosos que ponen los pelos de punta. Y no llego, la toqueteo un poco sí, pero nada del otro mundo. Si alguna vez puedo siempre he querido dar clases, con mi padre aprendí lo básico y a partir de ahí autodidacta. Hay noches que me frustro tanto que para irme contenta me vuelvo a las canciones que sé que controlo y que me gustan como suenan en mi guitarra. Qué le vamos a hacer, zapatero a sus zapatos.
De todas formas de exámenes no puedo dedicarle lo que me gustaría, porque cuando de verdad me gusta es cogerla los sábados y los domingos por la mañana. Unas horas y el resto del día es mucho mejor. Ahora las mañanas son intensivas y dolorosas, no me puedo permitir el estar rondando por allí por allá. Bueno, el sábado pasado me salté el régimen a la torera. Me llamó mi padre por teléfono y lo que iba a ser un saludo terminaron siendo dos horas hablando de música. Pero reconozco que no lo consideré perder el tiempo y me dio igual, bueno no me dio igual me encantó. Ya hacía que no disfrutaba tanto escuchando y descubriendo. Me pregunto cómo he podido pasar tanto tiempo sin algo tan básico como es el Full Said de Loggins & Messina. Desmigamos el disco y tuve una sensación parecida a la primera vez que escuché Music from Big Pink. Una maravilla de sensación para los que no lo hayáis captado. Un desconcierto ante tanta dualidad perfecta de voces, ante un fondo country, blues. Rock&roll. Puro soul. Y yo ante todo eso, ante tal exposición de sentimientos no soy nada, me disuelvo y me quedo hecha polvo.






 

4 comentarios:

  1. Tu padre si que sabe Charo, muchos días he tenido en la mente crear una entrada de Loggins & Messina, por una cosa o por otra no lo he hecho, bueno para eso estas tú, para crearla y tu padre para abrirte el universo de estos grandes que ya habrás comprobado como las gastaban musicalmente.
    Saludos a ti y a tu padre.

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  2. Como te decía el otro día, he escuchado ésto con tu padre muchas veces. Merece la pena conocerlos, ¿verdad?
    A navegar...
    Abrazo gigante.

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  3. L&M. Recuerdo la primera vez que me animé a escucharlos con su primer doble en vivo. Impacto. Que banda más increíble y que pedazo de composiciones. Ya somos varios a los que nos gusta navegar con ellos.
    Paz y amor para tí.

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  4. Por cierto, impactante foto de cabecera.

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